Tipos de fungicidas: Protege la salud de tus cultivos

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La agricultura desempeña un papel fundamental en la alimentación y el bienestar de la humanidad. Sin embargo, los cultivos vegetales enfrentan amenazas constantes de hongos patógenos que pueden afectar su salud y rendimiento. Para combatir estas amenazas, los en Iqv Agro disponemos de fungicidas que permiten mantenerlos a raya. 

Los hongos: Una amenaza para la agricultura

Los hongos son organismos microscópicos que pueden tener un impacto devastador en la agricultura. Infectan las plantas, se propagan a través de esporas y dañan las hojas, los tallos, las raíces y los frutos de los cultivos. Estos patógenos pueden afectar la germinación de las semillas, la calidad de los alimentos y la producción en general. 

¿Qué son los fungicidas?

Los fungicidas son productos químicos diseñados para prevenir, detener o eliminar el crecimiento de hongos patógenos en plantas y cultivos vegetales. Estos compuestos químicos actúan interfiriendo con los procesos biológicos de los hongos, ya sea de forma directa o al fortalecer la resistencia de la planta. Los fungicidas se utilizan en agricultura, jardinería y silvicultura para proteger los cultivos y prevenir pérdidas económicas significativas.

Tipos de fungicidas

Existen varios tipos de fungicidas, cada uno con un modo de acción específico. Dos categorías fundamentales son los fungicidas sistémicos y los fungicidas de contacto.

Fungicidas sistémicos

Los fungicidas sistémicos son absorbidos por la planta y se mueven a través de su sistema vascular. Esto significa que son distribuidos por toda la planta, incluyendo hojas, tallos, raíces y frutos. Los fungicidas sistémicos son efectivos en el tratamiento de infecciones fúngicas existentes y en la prevención de futuras infecciones. Algunos ejemplos de fungicidas sistémicos ampliamente utilizados incluyen:

  • Triazoles: Este grupo de fungicidas inhibe la biosíntesis de lípidos en los hongos, lo que afecta su crecimiento y desarrollo. El tebuconazol es un ejemplo de un fungicida sistémico de triazol.
  • Estrobilurinas: Estos fungicidas interfieren con la producción de energía en los hongos, lo que lleva a su muerte. La azoxistrobina es un ejemplo de un fungicida sistémico de estrobilurina.
  • Carboxamidas: Estos fungicidas actúan inhibiendo la germinación de las esporas de los hongos. El boscalida es un ejemplo de un fungicida sistémico de carboxamida.

Fungicidas de contacto

Los fungicidas de contacto, como su nombre indica, funcionan cuando están en contacto directo con el hongo patógeno. No se mueven a través de la planta y, por lo tanto, no proporcionan protección a largo plazo. Sin embargo, son efectivos en el control de infecciones en curso. Algunos ejemplos de fungicidas de contacto incluyen:

  • Azufre: El azufre elemental se ha utilizado durante siglos como un fungicida de contacto. Se adhiere a la superficie de la planta y mata los hongos al entrar en contacto con ellos.
  • Cobre: Los fungicidas a base de cobre se utilizan en el control de hongos patógenos. El cobre daña las estructuras celulares de los hongos y los mata.

La importancia de la elección del fungicida

La elección del fungicida adecuado es esencial para el control efectivo de enfermedades fúngicas en los cultivos. Esto depende de varios factores, como el tipo de patógeno, la etapa de desarrollo de la infección y el cultivo en cuestión. Los fungicidas sistémicos a menudo se prefieren para la protección a largo plazo, mientras que los fungicidas de contacto son útiles para tratar infecciones existentes.

Fungicidas en la agricultura

En la agricultura, los fungicidas desempeñan un papel crucial en la protección de cultivos de cereales, hortalizas, frutas y más. Por ejemplo, el Fusarium es un género de hongos que puede causar enfermedades en una amplia variedad de plantas. Los fungicidas sistémicos y de contacto se utilizan para prevenir y controlar estas infecciones. Por otro lado, el patógeno Phytophthora infestans, que causa el tizón tardío en las patatas, ha sido un objetivo de tratamiento con fungicidas para prevenir la pérdida de cultivos.

El impacto ambiental

A pesar de su importancia en la agricultura, el uso de fungicidas plantea preocupaciones sobre el impacto ambiental. La liberación de ciertos fungicidas en el suelo y el agua puede afectar a la fauna y al medio ambiente en general. Además, existe la preocupación de que el uso excesivo de fungicidas pueda dar lugar a la aparición de cepas de hongos resistentes.

Para abordar estas preocupaciones, se promueve la investigación y el desarrollo de fungicidas más selectivos y respetuosos con el medio ambiente. También se fomenta el uso de prácticas agrícolas sostenibles y el monitoreo constante para minimizar la exposición excesiva a estos productos químicos.

 

Los fungicidas son una herramienta esencial en la agricultura para combatir las amenazas de hongos patógenos. Los fungicidas sistémicos y de contacto que te ofrecemos en Iqv Agro desempeñan papeles específicos en la prevención y el tratamiento de infecciones fúngicas en cultivos. La elección y aplicación adecuadas de fungicidas son elementos clave para garantizar la salud y el rendimiento de los cultivos en la agricultura moderna.

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